En algún punto de tu formación académica, has necesitado o necesitarás investigar y documentarte sobre determinados temas para la elaboración de tu tesis de grado, artículos académicos, monografías, entre otras. Seguramente, en la biblioteca de tu universidad y tus profesores, te dirán que la institución invierte una gran suma de dinero para que, quienes realizan investigaciones, tengan acceso a información veraz y actualizada sobre todo lo que se está investigando a nivel científico y académico en las distintas ramas del saber.
Entendemos que nuestra primera opción es Google, porque ya hace parte de nuestro diario vivir. Pero, como estudiante e investigador, debes tener presente que la información que encuentras en este buscador, puede no estar verificada (fake news), o corresponder a la opinión de una o varias personas sin fundamentos científicos.
Por eso, te contaremos algunos aspectos que debes tener en cuenta para utilizar una base de datos, ya sea pagada por tu universidad o gratuita; y así, todas tus investigaciones académicas estén soportadas por bases de datos científicas y portales académicos.
En una base de datos puedes buscar por autor(es), títulos, o por palabras clave. Entonces, debes tener muy claro de qué manera quieres enfocar tu búsqueda. Si aún no lo sabes muy bien, puedes buscar de manera general el tema y obtendrás los enlaces a diversos documentos que podrían interesarte. Es decir, la búsqueda de los datos que requieres puede iniciar a modo de prueba y error. Pero, si ya has definido tu pregunta, conviene que establezcas un conjunto de palabras clave y uses el formulario de búsqueda avanzada, para que la información que recolectes contribuya con el objetivo de tu investigación.
Las bases de datos más usadas son: Scopus, Web of Science, EBSCO Host y Elsevier, entre otras. Con seguridad, puedes acceder a ellas, gracias a la biblioteca de tu universidad. También, existen varias de libre acceso: SciELO, Dialnet, World Wide Science, Google Scholar, Scholarpedia, Springer Link, Refseek, CERN Document Server, Microsoft Academic, JURN, ERIC, Ciencia.Science.gov, BASE y ScienceResearch.com.
Como recomendación final, asegúrate de que los textos que escoges para fundamentar tu investigación tengan como máximo 4 o 5 años de antigüedad. Así, puedes garantizar que tu trabajo se sustente en datos veraces y recientes. De igual manera, no dudes en investigar documentos en otros idiomas. Esto amplía el espectro de información con la que puedes cumplir los objetivos de tu trabajo y también incrementarás tus habilidades de aprendizaje de otras lenguas.
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